Los técnicos se enfrentan a estas decisiones todo el tiempo: deben reconstruir ensamblajes complejos, para lo cual se requiere mucho tiempo y dinero, o simplemente reemplazarlos, lo que a menudo cuesta menos dinero y requiere menos esfuerzo. La escasez de técnicos solo ha empeorado este problema.
Los conductores de camiones viajan miles de millas cada año. El mantenimiento de rutina es muy importante para mantener su equipo funcionando de manera óptima y segura, especialmente con el paso del tiempo. Además, la escasez de equipos nuevos a aumentado la presión en los administradores de flotas de hacer que sus equipos actuales recorran aún más millas.
La escasez de técnicos de mantenimiento es un problema que enfrenta nuestra industria en la actualidad. De acuerdo con la Oficina de Estadísticas Laborales, se espera que la demanda por técnicos y mecánicos de mantenimiento de camiones para trabajo pesado aumente un 8 % entre 2020 y 2030, lo que se traduce en la proyección de 28,000 puestos adicionales que se necesitarán cada año durante esta década. La escasez de técnicos de vehículos comerciales ha causado la necesidad de que la fuerza laboral actual trabaje más rápido y de manera más eficiente para mantener los camiones y remolques.
La escasez de técnicos ha afectado la manera en que los fabricantes de equipos originales y los proveedores producen camiones, remolques y piezas. Para aumentar el tiempo de actividad de los vehículos y acelerar el servicio, los fabricantes mejoran los diseños y ofrecen soluciones para hacerles mantenimiento con mayor rapidez cuando sea necesario, Una de esas soluciones es proporcionar opciones de reemplazo de todas las piezas, lo cual requiere menos horas, menos tiempo para los técnicos, menos especialización y un menor costo en general.
El concepto de reemplazar en lugar de reconstruir no es nuevo. Un ejemplo de esto sería que en lugar de reconstruir un motor de arranque o alternador, cómo se hacía años atrás, se haga el reemplazo completo, lo cual hoy en día es una práctica estándar en los talleres. La pregunta que deberíamos seguir haciendo es ¿qué más hace sentido?
Hacer mantenimiento a un extremo de rueda cuando los baleros necesitan ser reemplazados es una tarea extenuante y requiere varios pasos, entre ellos elevar el eje y remover los sistemas de frenos y neumáticos. Con el continuo crecimiento de los sistemas de frenos de disco, este proceso se está volviendo mucho más caro y laborioso. Garantizar que el mantenimiento en el extremo de rueda se haga correctamente es esencial.
Si tomamos en cuenta el valor, el costo de reconstruir un extremo de rueda y de la mano de obra que se necesita para hacerlo es mayor que obtener un nuevo ensamblaje completo. Si consideramos el tiempo de inactividad del equipo, los ahorros son mayores cuando se elige el reemplazo. El tiempo de dos horas que toma hacer el reemplazo también aumenta el rendimiento del taller, ya que el área de mantenimiento puede ocuparse de más vehículos y obtener más ingresos.
Al reconstruir un extremo de rueda también se corre el riesgo de causar daños o cometer errores en el ensamblaje. También puede ocurrir que los técnicos dañen la fundición o los baleros cuando retiran las copas de baleros antiguas y colocan las nuevas. En el caso de los extremos de ruedas de aluminio específicamente, puede que los técnicos no realicen los procedimientos de mantenimiento para remover las copas de baleros que requieren un soldador, o la instalación de las nuevas copas que requieren el calentamiento del extremo de rueda y congelar las copas antes de volver a ensamblar, o puede que la instalación del sello se haga de manera incorrecta, lo cual puede resultar en costosas reparaciones adicionales y multas por parte del Departamento de Transporte de EE. UU.
Si un extremo de rueda se reconstruye correctamente, solo se reemplazan los componentes nuevos, por lo general los baleros y el sello. Los componentes usados restantes pueden presentar desgaste, lo que causa un rendimiento limitado y menor vida útil en general. Por ejemplo, pilotos de ruedas/tambores desgastados en la fundición que pueden causar un montaje inapropiado de las ruedas, pernos de ruedas elongados/oxidados que podrían quebrarse, o un anillo de ABS corroído que podría causar señales defectuosas al sistema ABS.
Yendo un paso más allá, un extremo de rueda preajustado puede reemplazar un extremo de rueda convencional, lo que agrega más valor al taller de mantenimiento y la flota. Debido a que el extremo de rueda preajustado viene completamente ensamblado, incluidos los baleros y sellos directamente desde la fábrica, se garantiza el ensamblaje correcto de los componentes en el ensamblaje del extremo de rueda. Con solo deslizar el extremo de rueda en el husillo y rotar la tuerca de husillo según lo recomendado, el técnico evita el procedimiento de ocho pasos del ajuste de los baleros, incluida la medición final de la holgura.
Afortunadamente, la tendencia de reconstruir está desapareciendo debido a que las flotas prefieren piezas reemplazables. El reemplazo de la maza completa garantiza calidad, consistencia y el mismo producto original con las tolerancias precisas requeridas. Además, los fabricantes de mazas ofrecen excelentes garantías para alentar aún más la adopción del reemplazo de las mazas. Por el contrario, las garantías de las piezas individuales de una maza reconstruida rara vez superan un año, y es solo para las piezas.
La continua escasez de técnicos de mantenimiento recalca la importancia de reemplazar los productos en lugar de reconstruirlos. Si usted tiene productos de buena calidad que rara vez se averían, no necesita tantos técnicos. Asimismo, los administradores de flotas necesitarán menos técnicos si pueden hacer mantenimiento a tractores y remolques de manera más eficiente o el personal actual podrá hacer mantenimiento a más vehículos en la misma cantidad de tiempo.
VANCOUVER, WA | por Brian Reiger, vicepresidente de Ventas de Norteamérica
Fuente original : Propietario de flota
